LA DESILUSIÓN DE UN SUEÑO DE AMOR

De Michel Bardales García

Una mañana funesta, la protagonista de la historia de mi vida regresó para solo recoger sus cosas y destruir nuestro pequeño sueño que recién estaba aprendiendo a caminar. Se llevó todos nuestros buenos recuerdos y dejó escribiendo en mi pecho que toda la culpa era mía.

Debido a eso, contemplé mi imagen todos los días en un espejo caído para ver alguna señal que me confirmara todas esas infames acusaciones de haberme convertido en uno de esos asesinos de las promesas de amor.

Me observé sollozando con un inmenso dolor indescriptible que iba consumiéndome y convirtiéndome en lo que soy ahora cuando utilizo mi lápiz aprendiz para escribir sobre mis deseos de apagar mi corazón y ya no sentir este terrible vacío que ha ocupado mi tiempo y respiración.

Pero aun así, hay momentos de terquedad que me inducen a la curiosidad de asomarme por la ventana para ver si se había arrepentido y regresaba para borrar todo lo que había sentenciado en mi pecho desnudo. Pero lamentablemente, solo pude verla embarcándose en un nuevo barquito de papel porque el mío se había inundado con las tantas lágrimas que ambos derramamos en esas historias en las que no sabíamos interpretar el verdadero significado del amor.

—¿Qué haremos ahora? —preguntó mi lápiz aprendiz al verme llorar azotado de penas y alimentar al mismo tiempo a las pésimas decisiones de mi orgullo y capricho.

—Solo llorar, mi amigo —le respondí empapando las blancas páginas de mi libro de ficciones—, solo eso nos queda luego de fracasar en el intento de hacerle entender que mi amor, a pesar de haber sido humilde había sido indeleble, significativo y sincero. No era perfecto pero era verdadero y mi corazón sollozante se los puede confirmar.

Así quedó nuestro sueño, lo que un día fue los primeros pasos de nuestra promesa de amor, ahora solo es mi decadente prisión donde cumplo mi aberrante condena por no saber amar como ella me lo pidió. Solo le amé como yo lo sabía hacer. (La vida y los libros de historias me enseñaron que el amor estaba lleno de imperfecciones.)

(Imagen de Thomas B. en Pixabay)