"AMOR DE MANTIS RELIGIOSA"

Michel Bardales García

 ¡Ay, tu amor! ¡Qué lindo fue tu amor! ¡Delicioso! ¡Dulce! Desde la primera mirada —cuando tu mascarilla solo me permitía ver tus ojos— hasta el último beso luego de tu confesión. ¡Qué lindo fue tu amor de juventud! Si alguien me pregunta si alguna vez sentí amor de verdad: mi respuesta iría acompañado de tu precioso nombre que atrapé muchas veces en mis corazones de colores. Amaba mucho tu voz risueña —a veces como de niña juguetona—  que con rabietas y risas me devolvías la razón de mi existencia. ¡Ay, mi amor! ¿Cuándo dejaré de decirte amor? ¿Cuándo dejarás de decirme amor? ¿Cuándo? Dímelo, por favor. ¿Recuerdas que un día te dije que te amaría por siempre? ¡Ay, de mí! Cómo quisiera haberte mentido ese día para no vivir esta tortura: Te di todo el amor que había en mi corazón y tú lo recibiste —tal cual una mantis religiosa hembra— y te jactaste de todo lo que te entregué y luego solo me mataste con tu tierna y piadosa confesión.

 IMAGEN/CORTESÍA@PINTEREST

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