SUEÑOS DE CRISTAL

SUEÑOS DE CRISTAL
…

1

“LA MANO TÍMIDA”

- ¿Qué escribes? -

Preguntó una mirada que tenía voz real.
…
Alguien respondió:

Un poema que está escrito en la palma
de una mano tímida que no se podía expresar.
…
Era aquella mano que tenía el mal como corazón,
y que atravesó el mundo de los poetas
para curar las heridas que le evitaban correr.

En su camino se encontró con el canto de una mirada
que le sedujo a aventurarse en esos pasos
que danzaban hacia ella.

Al encontrar de quien era esa voz
quiso decirle lo mucho que le encantaba su melodía
y sobre todo por el arte de tener esa mirada.

Pero no pudo hacerlo,
su timidez le cortó la voz en siete escenas
bajando su mirada por temor.

2

“BUSCANDO UNA VOZ”

Lleno de vergüenza al no poder hablar frente a esa mirada,
se alejó por el camino más estrecho
hasta llegar a la morada de un viejo pozo azul.

Ahí se encontraba el pozo fabricante de nubes
que parecía tener la magia de entregar aventuras.

-¡Busca al poeta! –

Le dijo a la mano mientras esculpía una de sus nubes
que tenía la misión de dar sombra a un niño perdido en el desierto verde.

- Hace un tiempo una princesita pasó por aquí
y dejó unas gotas hechas de sus lágrimas;
úsalas para llegar al poeta y vencer a esas sombras
que lo abrigan en su soledad de piedra.

El pozo fabricante de nubes le indicó todo lo que necesitaba saber
para poder llegar al cuarto que tenía prisionero
al poeta convertido en piedra.

3

“EL POETA”

¡Los caminos estaban mudos!

Pero la mano siguió las cicatrices
que dejó la princesita que una vez
fue la musa de aquel poeta.

Sus huellas eran frescas y de sabor dulce;
estas llevaban a un recinto confundido
por una brumosa oscuridad.

Recordando las palabras del viejo pozo,
sacó esas lágrimas y el amor que había en ellas
hicieron huir a toda oscuridad
que rodeaba aquel lugar.
…
Cuando pudo entrar al recinto olvidado,
llegó a un cuarto abandonado por la luz,
vio que una estatua de piedra estaba
junto a una chimenea de hielo.

(Para llegar a él había usado todas esas gotitas de esperanza
que le había entregado el pozo fabricante de nubes.)

Sólo le quedaba una gota,
una pequeña lágrima que fue brotada
en el abrazo de una despedida.

Se acercó a la estatua y puso esa gota
en el corazón endurecido de aquel poeta
que un día se dejó vencer.

Y como había pronosticado el pozo,
la gotita comenzó a producir su magia;
el poeta comenzó a recordar su poesía
y en medio de un verso
comenzó a caminar.

La mano emocionada por este encuentro,
comenzó a explicarle la razón de haberlo buscarlo;
y que necesitaba de él para despertar
a esa historia que hace mucho tiempo
permanecía dormida.

El poeta reconoció a esa mano,
sabía que fue él quien lo había creado en un poema
que nunca pudo terminar.

(Se lo entregó a la poetiza Sek
y talvez ella le quitó el mal de su corazón
y es por eso que hoy viene a él para que le enseñe a soñar)
…
Vio sus ojos y se sumergió en ellos
para saber que era lo que la mano quería de él.

Observó todas sus aventuras
y de cómo llegó a aprender a soñar
en el romancero de musas de inspiración.

Sonrío al ver como le habían enseñado
y saliendo de sus ojos
estrechó sus manos a su alma
y en medio de sus propios ecos pronunció:

- ¡Vamos!

Ya ha pasado mucho tiempo que he dormido
y veo que ya es hora de seguir forjando las palabras
que en mi voz reclaman salir
hacia ese verso que anda perdido. –

El poeta olvidó sus sombras
y caminó junto con la mano
hacia esa historia que acababa de nacer.

4

“EL ENCUENTRO”

Al salir de ese camino olvidado,
el poeta y la mano se dirigieron
hacia el lugar donde se encontraba
aquella mirada que cantaba hacia el sol.

Al llegar la encontraron en medio de unas sonrisas.

Por ello se escondieron en medio de un arbolito adolescente,
y desde allí la mano guiado por su corazón
comenzó a dictar al poeta los sentimientos
que en él nacieron cuando vio a esa sonrisa.
El poeta escuchó cada palabra
y convirtiéndolas en versos
las pronunció con el viento
que las llevó a aventurarse entre los cabellos
de esa sonrisa que distaba de su ego
al no saber que germinaba en una historia
que estaba a punto de nacer.

5

“LA UNIÓN”

Cuando el viento sopló en el cabello de aquella mirada,
su perfume comenzó a expandirse
hasta los catorce sentidos de estos dos seres
que la observaban desde aquel arbolito adolescente.

Ese aroma era uno conocido por el poeta,
había escrito sobre su existencia
y de cómo la usaban las nueve musas de la inspiración.

- ¡Unámonos! –

Dijo el poeta a la mano
que seguía hipnotizado por aquel aroma
que el viento hacía danzar en sus sentidos.

- Seamos un solo sentimiento
para crear el poema más bello del mundo
y así poder cautivar el corazón de aquella sonrisa
que tiene el aroma exacto para soñar. -

6

“EL MUNDO DE CRISTAL”

¡Uno solo!
¡Son ahora un solo ser!

Al unirse el poeta y la mano en un solo cuerpo,
ganaron el poder de crear mundos en los sueños.

Después de ese encuentro en aquel camino
ambos se quedaron con un fragmento del recuerdo
de aquella mirada que tenía el perfume de una musa inspiradora.

Pero al unirse también esos fragmentos se unieron
y dieron vida a la imagen de una princesita especial.

Crearon para ella un mundo dedicado a sus ojos.

¡Un mundo de crista!

Uno hecho por el brillo de sus hermosos ojos
y que se ubicaría en el extremo oeste
que sería protegido por Céfiro,
el dios del viento amable y perfumado.

7

“LA ENVIDIA ASTRAL”


Cuando el mundo de cristal fue creado,
lo hicieron sin consultar a la asamblea de poetas
que rendía sus versos al amor de la luna.

Una noche que estaba llena de recuerdos,
las estrellas fueron ante la luna
para reclamarle que en el mundo de poetas
hay dos brillos que quitaban protagonismo
a los demás brillos que el hacedor de versos
había creado para iluminar a su poesía.

La luna no dijo palabra alguna
pues su atención estaba en aquel mundo de cristal
y en ella estaba aquel poeta que un día ella misma
lo vio Convertido en piedra para que a nadie más le escribiera.

- ¡Has vuelto poeta! -

Dijo la luna enfurecida
mientras sacudía los mares de papeles
haciendo naufragar las historias
que en ella se estaban escribiendo.

- ¡Hacedor de versos!
¡Escúchame!

Invoco a tu lápiz prófugo
a dar cuenta de esta historia
que niego dar mi esencia a esos poemas
que tu mismo tendrás que matar.

Con estas palabras el hacedor de versos
miró hacia el mundo de cristal
y vio al poeta que ambos convirtieron en piedra.

- ¡Maldito poeta!
¿Cómo es que ha salido de su prisión?
¡Seguramente fue el pozo fabricante de nubes! -

Al decir esto los ojos del hacedor de versos
comenzaron a llorar
porque tomó su lápiz de muerte
y como un enorme rayo envió su castigo
a ese camino que ya no existiría más.

El pozo fabricante de nubes
observó como aquel lápiz lo azotaba destruyéndolo
y secando todas sus nubes que querían nacer.

- ¡Este pozo ya ha muerto! -
Dijo la luna.

- Imprudente ha sido por entregar esas gotas
que sólo han prolongado el dolor de la poesía. –

Ambos seres observaron al pozo fallecido
y juntos volvieron sus miradas al mundo
que muy pronto tenía que morir.

8

“NACIMIENTO DE LA MUSA DE CRISTAL”


El mundo de cristal ya había sido creado,
pero la princesita era sólo un recuerdo
que necesitaba a alguien real para seguir existiendo.

Para eso, el poeta cruzó los mares de palabras
hasta llegar a las puertas del mundo real.

Las fronteras de estos dos mundos
están selladas por un enorme espejo
que sólo tiene dos puertas para entrar y salir.

La primera puerta es por un camino
hecha por un arco iris
que tiene un árbol soñador como guardián.

La segunda puerta es el más impreciso
porque es el prohibido por el hacedor de versos.
Muchos han naufragado intentando pasar
o salir a este mundo que está rodeado
por un enorme mar de palabras.

Pero este poeta también era creador de mundos;
él hizo que este mar se calmara
para llegar al reflejo real de aquel camino
donde habían encontrado el recuerdo de esa mirada.

Al final de su travesía pudo encontrar a la dueña de esos recuerdos
que formaron a la princesita de cristal.
vivía en un lugar cálido
y no había señal alguna del hacedor del mal.

Su ventana estaba abierta
y como un sueño entró en sus ojos
y confirmó con su magia que se trataba de una musa real.

Esta musa pudo sentir que la poesía le rodeaba
y con una sonrisa pudo escuchar al poeta creador:

- ¡Existe un sueño!
Uno que alberga a un mundo de cristal
que fue hecho con dos fragmentos de tu recuerdo
y en donde vives tú como una princesita especial.

Pero sólo son recuerdos de tu mirada,
necesitan de ti para seguir existiendo
y mostrar su brillo a los caminos
que circulan el mundo de los poetas.

¡Sólo debes soñar!
¡Creer en ellos más que en tus propios pasos!

Si lo haces aquel mundo brillará más que los astros
y su destello será el reflejo
de todas tus miradas que le has obsequiado a la poesía.

¿Soñarás?

Desde mis ecos pronunciados
estaré esperando tu respuesta
para llevarlo a ese sueño y darle la eternidad
que anhela teniendo tu ser como su musa de verdad.

¡Sólo debes responder!

Te pregunto a ti que lees esta historia
que fue escrita a escondidas del hacedor de versos.

¡Ven y únete a esta historia!
Toda palabra fue esculpida para ti.

¿Quieres soñar?

¡Respóndeme! -

La musa desde su realidad leía cada palabra
y al descubrir que esas preguntas
eran para ella, sonrió y respondió:

- ¡Si quiero soñar! –

Sólo bastaron esas palabras
para que el poeta tome su barco de papel
y regrese a ese mundo de cristal.

¡La musa es buena!

¡Cree en los sueños!

Fue lo que el poeta gritó
con el viento de su llegada.

- ¡La musa es buena!
Le dará vida eterna a este mundo
creado de sus recuerdos
que le han nombrado como la musa de cristal. -

Detrás del poeta estaba la musa real,
llegaba a ese mundo
para adornarlo con sus sueños
y también llegaron todos los seres
que fueron expulsados de las historias perdidas.

Así fue que el mundo de cristal fue habitado
por seres de sueños mágicos
y reinados por la princesa de cristal
y un poeta que mantuvo el hecho de soñar.
…

(La historia se siguió escribiendo)

9

“EPILOGO DE UN CREADOR”

Cuando la musa real fue a vivir en el mundo de cristal,
abrió sus brazos a todos los seres mágicos
que no tenían una historia para vivir.

Esto no fue bien visto por la luna y las estrellas
que no soportaron que el brillo de los ojos de esta musa
hayan destellado más que ellas en todas sus historias.

Tenían a su lado al hacedor de versos,
aquel que había creado el mundo de poetas
y a estos dos seres que se unieron
para hacerse un poeta creador de mundo prohibidos.

El hacedor de versos mostró su ira
al destruir al pozo fabricante de nubes
y dirigió su próximo enojo a ese mundo
que fue creado en contra de todos sus designios.

Por ello se formó una triada maligna
que comenzó a seducir
a la asamblea de poetas que dejaron de escribir.

y entre todos llamaron a su más noble enemigo.

¡El silencio!

Y el vino y se apodero de las respuestas
de la musa real que leía cada historia
que el poeta le enviaba desde su lejano lugar.

Sólo quedó esperar.

La historia de este mundo de cristal aun se estaba escribiendo
y era preciso esperar las palabras mudas de la musa
que haría aprobar la sentencia de la triada
y nunca más se pudiese hablar de ese mundo de cristal.

¡Sólo queda esperar!

[…]

SETIL DE BARGAM
Diciembre del 2009