ANTES DE ESCRIBIRTE UN POEMA DE AMOR

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“ANTES DE ESCRIBIRTE UN POEMA DE AMOR”

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Antes de escribirte un poema, prefiero escribir un pequeño prólogo o introducción a este sentimiento que está recorriendo mis venas como una luciérnaga que va iluminando todas mis zonas oscuras y tercas que se negaban a vivir el aroma de una nueva y final historia de amor.

Quiero escribirte, por ejemplo: De cómo mis ojos se detenían al presenciar una llegada tuya con esa sonrisa casi disimulada que comencé soñarlo luego de haberte convertido en el secreto de mis susurros que pronunciaban suavemente tu nombre y la frase terminada en lo que hoy pronuncio cuando despierto abrazando a una almohada que se disfraza de ti.

Desde ese momento, desde este momento, ya tengo en mí algunos sueños que ya he construido en mi corazón. Desde mi confesión hacia tu mirada, no he dejado de pronunciar tu nombre, de imaginarte llegando hacia mí con una sonrisa tímida y yo sin saber dónde darte el beso de bienvenida. Seguramente comenzaré desde lo permitido y luego se iniciará la batalla para conquistar tus labios. (Esa será la primera historia)

En eso pienso, en eso sueño, eso anhelo… de buscar la manera de llegar a tus labios y de cómo mirarte y qué palabras decirte sin que lleguemos a una común cursilería.

No pretendo que sea un romance o una danza de besos y abrazos que se pierden con la rutina. Lo que deseo es que se convierta en un sueño que podamos contar a nuestros destinos como lo mejor que hemos vivido en nuestras vidas atentadas por el tiempo que es enemigo de nuestro amor… ¿Por qué enemigo? Simplemente porque se burló de nosotros trayéndome al mundo muy pronto y a ti demasiado tarde para que el universo nos permita ser los mejores amantes y tejedores del amor.

Por eso aún pienso en cómo podría escribirte un primer poema o tal vez una hermosa historia en prosa poética. Uno en el que ambos seamos los únicos protagonistas, los únicos que se miren a los ojos para darse cuenta que los sueños de amor sí existen en la vida real y que se viven cuando se deja atrás al mundo y solo importe buscar momentos que se recuerden acompañados de una almohada abrazadora.

Pero eso ya lo veremos según como vivas mis palabras. Solo si te atreves a creer en los sueños de amor que te profeso. Solo si estás dispuesta a sentir y llenar tu corazón de mis palabras que las escribo luego de los recuerdos de todas las mañanas que estuviste justo a mí como el mejor nombre que se ha quedado impregnado como un hermoso pronunciar.

Así comenzaré esta historia… nuestra historia. Con un pequeño prólogo a todos los poemas que construiré luego de esas charlas nocturnas que se volvieron un confesionario de todo lo que sentí y que no me atreví a decírtelo al pensar que no descubrirías que eras tú la sonrisa que habitaba en mis historias.

Y espero, con la mano lleno de fuego e inspiración. Que seas la persona a la que estoy escribiendo. No solo la imagen, sino la persona que lleva en su interior las ganas de soñar y conocer el amor que solo se vive cuando se cree en la poesía.

Y no lo olvides, te estaré esperando luego de saber que has leído mis palabras. Aquí estaré en mi silencio, en el mirarte a la distancia mientras escribo las rimas de nuestro primer poema. Aquí estaré soñándote y deseando que ya estés a mi lado para decirte que todo esto es más que palabras escritas… que todo esto que lees ya es el principio de  nuestra historia de amor que ya se volvió una hermosa realidad.

“EL POETA SOL”