Michel Bardales García
¡Ay, amor
mío! ¡Vida mía! ¡Muerte mía! ¿Por qué no me ayudas a olvidarte? Ten piedad de mí
y no me llames más y no preguntes si estoy bien —¿O te burlas?— porque sabes
que cada día me muero, me muero, me muero pronunciando tu nombre que sigo
encerrándolo en corazones de colores. ¡Ayúdame, amor mío! Ya no me llames ni
preguntes cómo me fue en mi día. Eso ya no te importa porque solo quieres saber
si ya encontré a alguien en mi vida. ¡Ayúdame, amor mío! Déjame ya morir solo
para olvidarme de tu rostro que lo ensucias junto ese despreciable que nunca
sabrá del delicioso arte de la escritura. ¡Ayúdame, amor mío! Quítame tu nombre
de la punta de mi lengua o córtala para ya no pronunciarla en esas mañanas que
despierto muriendo pensando en tu maldito y dulce amor. ¡Ayúdame, amor mío! ¡Ya
no me llames! Solo finge que ya estoy muerto y pon un incoloro girasol marchito
en mi tumba y vete de mi vida para que seas infeliz —eternamente y bajo mi
sentencia— con ese despreciable que nunca sabrá escribirte poesía.
IMAGEN/CORTESÍA@PINTEREST
https://pin.it/1jMixik
No hay comentarios:
Publicar un comentario
ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO LEER ESTAS HISTORIAS QUE COMPARTO CON USTEDES... ESCRIBAN DEJANDO SUS CRITICAS Y COMENTARIOS SOBRE LO QUE ESCRIBÍ... NO OLVIDEN DEJAR SUS NOMBRES PARA PODER DARLES UNA RESPUESTA INDICADA.......GRACIAS!!!
SI DESEAS RECIBIR LO NUEVO QUE ESCRIBO EN ESTE BLOG SOLO ESCRIBEME A: setilx@hotmail.com