Luego de haberte
deseado los “dulces sueños” de la noche, mi amoroso recuerdo ingresó a tus
pensamientos y te fabricó un hermoso sueño de amor: Ambos salimos de nuestras
rutinas y dejamos atrás los miedos y dudas heredados del pasado y decidimos
comenzar nuestra propia historia donde yo —el Poeta Sol— y tú —la Musa de los Girasoles—
nos conocíamos de pronto y nos curamos juntos nuestras heridas. Tú me diste tu sonrisa
y yo te entregué poemas que alegraron de nuevo tus días.
—¿A dónde
vamos? —me preguntaste mientras te vestías de universo.
—Iremos a
visitar a los astros —le respondí amorosamente— que son los testigos de este novicio
amor que nació cuando ambos necesitábamos una luz que nos rescate de esa
oscuridad que nos dejó la guerra del desamor.
Fue así que
de un solo salto llegamos a esas acolchonadas nubes que nuestro pozo de los
deseos había fabricado para sostener todas las historias que yo crearía para
conquistar tu corazón. En esas nubes también crecían esos girasoles recitadores
de versos.
El sueño
era perfecto porque el pasado se había vuelto torpe y no pudo alcanzarnos. Ambos
saltamos de nube en nube tocando las mejillas de esas estrellas cantarinas que
le narraban a la luna todo lo que estábamos viviendo. También cantaban lo que
ambos sentíamos porque todavía éramos tímidos para expresar nuestro aún
naciente amor.
Y antes de
volver a nuestros recintos, te columpiaste en la luna mientras yo te contemplaba
y te recitaba muchos versos que yo deseaba hacer realidad. Uno de ellos, como
lo hice en ese momento: fue acercarme a ti lentamente para tomarte de las manos
de una manera tan torpe porque los nervios me ganaban porque mi amor por ti era
indescriptible. Estábamos frente a frente en ese brillante columpio detenido.
Nos miramos tratando de no perder ningún detalle de ese momento. Todo era
perfecto. Las estrellas cantarinas tenían sus ojos agigantados porque estaban a
punto de presenciar ese beso soñado en nuestra historia.
Me sonreías y yo te contemplaba con ternura. Cerramos nuestros ojos y al acercarnos lentamente escuchamos el sonido de ese despertador que nunca deja completar ese sueño que se ha repetido en diferentes matices. Ahí nos quedamos ante la expectativa de nuestros astros. Suspirando y pensando si habíamos soñado lo mismo y si ese día tendríamos el valor de encontrarnos y hacer realidad el final de ese sueño que sería el principio real de nuestra versada historia de amor.
(Imagen de ParallelVision en Pixabay)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO LEER ESTAS HISTORIAS QUE COMPARTO CON USTEDES... ESCRIBAN DEJANDO SUS CRITICAS Y COMENTARIOS SOBRE LO QUE ESCRIBÍ... NO OLVIDEN DEJAR SUS NOMBRES PARA PODER DARLES UNA RESPUESTA INDICADA.......GRACIAS!!!
SI DESEAS RECIBIR LO NUEVO QUE ESCRIBO EN ESTE BLOG SOLO ESCRIBEME A: setilx@hotmail.com